Adoro todo
cuanto nos reclamas;
la calma, tu a sosiego, la alegría,
las ansiadas ganas de rebeldía
bañada en salitre, que ya tanto amas.
la calma, tu a sosiego, la alegría,
las ansiadas ganas de rebeldía
bañada en salitre, que ya tanto amas.
Ni tampoco repudio
lo que tramas
mirando al mar del sur con pillería,
con tu aire insolente de picardía
con el brillo de tus ojos exclamas:
mirando al mar del sur con pillería,
con tu aire insolente de picardía
con el brillo de tus ojos exclamas:
¡Al agua! Con
siroco o tramontana,
con prisas, sin temor y sin cautela.
Siempre deseosa, mi audaz guardiana,
de embarcarte, ligera, a toda vela.
con prisas, sin temor y sin cautela.
Siempre deseosa, mi audaz guardiana,
de embarcarte, ligera, a toda vela.
Te saqué de tierra adentro, Xalana,
¡perteneces al mar, mi centinela!